El positivismo tóxico: Porque está bien, no estar bien

WhatsApp
Facebook
Twitter
Telegram
Pinterest
El positivismo tóxico: Porque está bien, no estar bien

Es muy común que al escuchar como una persona no se siente a gusto con su imagen, inmediatamente saltemos a darle ánimos, resaltando los aspectos positivos de sí mismos; esto es una prueba de la empatía humana al no desear ver como alguien está pasando un mal rato, pero, ¿Sabías que esto es un rasgo de la cultura del positivismo tóxico?

    El siempre buscar el lado “positivo” a las situaciones, sin importar la gravedad que implique, puede llegar a ser dañino cuando empezamos invalidar las emociones normales que experimenta el ser humano.

    Por eso hoy, en BBK, te contamos todo sobre esta actitud extremista que puede poner en riesgo tu salud mental y la relación contigo misma.

El positivismo tóxico y la psicología positiva: ¿Cuál es la diferencia?

     Las últimas dos generaciones que están llevando la fuerza laboral actual, comparten un pensamiento psicológico que marco la década de los 90’, la Psicología Positiva. Esta forma de estudiar al ser humano a través de la psicología, se basa en la investigación sobre lo que hace a las personas felices y genera una respuesta positiva de ellas.

    Emociones como la felicidad y sensaciones como el bienestar, son dos aspectos que la Psicología Positiva busca que la persona conserve frente a la vida, esto en cierta parte es bueno, porque hace que las personas enfrenten los momentos retadores con una perspectiva esperanzadora que los haga sentir bien.

    El problema ocurre cuándo esta tendencia de ver el mundo, ignora por completo las otras emociones naturales y saludables del ser humano, como la tristeza, la ira y el miedo. No es saludable experimentar una sola emoción por un tiempo indefinido, cada emoción tiene su lugar en la vida y no está mal experimentarlas, a esto es lo que se le conoce como positivismo tóxico.

El positivismo tóxico: Porque está bien, no estar bien

Lee más en: Óleo de Argán: la Magia del Mediterráneo para tu cabello

¿Cómo sé si estoy cayendo en el positivismo tóxico?

    Evalúa si estas experimentando las siguientes situaciones:

  • Necesitas que todo momento siempre sea perfecto.
  • Escondes los sentimientos reales que se están sintiendo en una determinada situación.
  • Te sientes culpable por experimentar emociones negativas como: la tristeza, el enojo o el miedo.
  • No validas los sentimientos de sufrimiento de otras personas.
  • Usas de forma frecuente de frases como “tienes que ser positivo” y “todo va a salir bien”

¿Por qué puede deteriorar tu autoestima?

    La positividad tóxica genera que, al no ser capaz de aceptar todas las emociones, las demás personas aíslen a la persona que no logra ser empática con sus situaciones. El aislamiento social, combinado con la falta de autenticidad emocional, puede causar un declive en la autoestima personal.

    Se crean unas expectativas irreales que el ser humano es incapaz de alcanzar, porque no es posible estar feliz siempre y esto lleva a que se refuercen las sensaciones de fracaso y falta de valor.

¿Cómo salir de la burbuja del positivismo tóxico?

    Comienza aplicar en tu día a día estas prácticas:

  • Tomate el tiempo para reconocer y validar tus emociones, tanto positivas como negativas, sin juzgarlas
  • Examina críticamente los pensamientos automáticos que te impulsan hacia la positividad tóxica, como “debería estar siempre feliz” o “no puedo permitirme sentirme triste”.
  • Trátate a ti mismo con la misma bondad y comprensión que tendrías hacia una amiga, reconoce que es normal tener altibajos emocionales y que no eres perfecta.
  • Habla con amigos de confianza, familiares o un profesional de la salud mental sobre tus sentimientos y experiencias.
  • El autocuidado es esencial para fortalecer tu resiliencia emocional y superar la positividad tóxica, para ello dedica tiempo a aquello que te hace feliz y que promueva tu bienestar emocional.
El positivismo tóxico: Porque está bien, no estar bien

    Recuerda, para poder amarte por fuera, todo el amor debe provenir de adentro y cuando te sientes a gusto y cómodo en quien eres como persona, eso se reflejará en tu belleza.

Deja un comentario